El cannabidiol, común mente conocido por su acrónimo, CBD, es uno de los muchos cannabinoides presentes en las plantas de cáñamo y cannabis, ambas pertenecientes a la misma familia (cannabis sativa). Sobre esta molécula se podría hablar durante horas, pero en pocas palabras el CBD es un compuesto orgánico que tienen estas plantas y que interactúa con nuestro cuerpo ofreciéndonos usa serie de efectos beneficiosos.
El aceite producido a base de cannabis rico en CBD tiene varias aplicaciones, pero su uso más común esta generalmente vinculado al alivio del dolor crónico. También puede utilizarse para ayudar a paliar las dolencias de las enfermedades inflamatorias intestinales o cutáneas, la ansiedad, la depresión o incluso las convulsiones de la epilepsia refractaria. Y no solo eso, el valor nutritivo de los aceites y el papel regulador sobre el apetito que posee lo convierten en un complemento o suplemento alimenticio muy interesante.
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